Horror Vacui

Tenía que llenar las hojas como fuera.
Quinientas palabras, ni una más, ni una menos.
Tenía que llenar las hojas como fuera.
Dibujos por todas partes.
Tenía que llenar las hojas como fuera.
Aún quedaban rincones vacíos.
Tenía que llenar las hojas como fuera.
Tanto espacio y tan pocas ideas.
Tenía que llenar las hojas como fuera.

Llego el día del concurso. Me quedé dormido en mi habitación, soñando...
Mi escrito, lleno de dibujos y porquerías, nunca fue entregado.
Quedo ahí, tirado... Encima de la mesa de mi habitación... Toda rayada de arriba a abajo; con textos, dibujos y números...

Tenía una obsesión.
Tenía que llenar las hojas como fuera...

Jorge ML.

Opera Nocturna

Fue una función excelente. Estremecí al público como nunca lo había hecho.

Me sentía pletórico.

Agotado, fui al bar del anfiteatro. Tomé una copa del mejor champagne y estuve charlando con un compañero de la Opera Nocturna. Le expresé lo satisfecho que me sentía, pues la impactante cara del publico me hizo sentir vivo de nuevo. Me lanzó una mirada suspicaz, pero no dijo nada al respecto, así que no pregunté.

Una vez fuera, me despedí y volví a mi apartamento.

Estaba todo tirado por el suelo, tal cual lo dejé. Fui a cambiarme. Removiendo entre aquel desorden, logré encontrar el baúl donde guardo la ropa de la función. Tal fue mi sorpresa cuando hallé en su interior, mi máscara blanca.

Ahora lo entiendo todo.

Jorge ML.

La doncella de hielo

A Nuria.

Cuando todo parecía perdido, la doncella de hielo le salvó la vida.

Aislado del mundo y viviendo como en una ilusión, el joven iba morir en la más profunda oscuridad. Apareció de repente, aquella bella dama que lo empujaría fuera de la trayectoria de la guadaña.

Congelada por un doloroso pasado, aquella muchacha se sintió atraída por el calor humano, y aunque su unión estaba prohibida, emprendieron juntos el camino.

Fue con el paso del tiempo, que el joven se convirtió en un ser completo, que amaba y era correspondido, y que a su vez, la doncella de hielo perdió su armadura, derretida por la pasión abrasadora de su joven amado.

De este modo, recorrieron el camino de la vida en una misma senda, cogidos de la mano.

Jorge ML.

Esfinge

Aunque alta, fuerte y orgullosa, espera eternamente sentada y en silencio, conseguir la mortalidad y vivir cada día como si fuera el último.

Jorge ML.